Por unanimidad, el consejo del Banco Central (BC) decidió mantener en su mínimo histórico de 1,75% la tasa de interés de política monetaria. Este indicador sirve de referencia a las tasas de los créditos que entregan las instituciones financieras, incluidos los hipotecarios.
Pese a las presiones inflacionarias que ha despertado la crisis social, el instituto emisor estimó que la tasa se mantendrá en su actual nivel durante los próximos meses.
“El BC reafirma su compromiso de conducir la política monetaria con flexibilidad, de manera que la inflación proyectada se ubique en 3% en el horizonte de dos años”, señala su informe de diciembre.
En ese contexto, ha sido el propio mercado financiero el que ha reaccionado a la crisis subiendo paulatinamente sus tasas para los créditos hipotecarios. Si durante la primera semana de noviembre las tasas promedio llegaban a 1,19% anual, en la primera semana de diciembre habían subido a 2,03%.