Un importante respaldo recibió el proyecto para la construcción de un tren rápido que conecte a Santiago con Valparaíso y Viña del Mar. La ministra de Transportes, Gloria Hutt, afirmó que para el gobierno esta iniciativa privada es “de gran interés”.
De concretarse, el tren rápido uniría a la capital con ambas ciudades costeras en menos de 45 minutos; es decir, aproximadamente la mitad del tiempo que demora hoy este trayecto por carretera.
Elaborado por el consorcio chino-chileno TVS, el proyecto considera una inversión de 1.600 millones de dólares sin subsidio estatal. De acuerdo a sus proyecciones, el nuevo tren rápido podría entrar en operaciones en 2025, trasladando anualmente a unos 20 millones de pasajeros y otras 20 millones de toneladas de carga.
Entrevista de El Mercurio, la ministra Hutt recalcó que a este gobierno le interesa fortalecer las opciones para que los usuarios puedan elegir entre sistemas de transporte competitivos.
“Nos encontramos analizando la propuesta de TVS para clarificar un conjunto de materias estratégicas que nos parecen relevantes. Es el caso del costo de potenciales inversiones o gastos fiscales de contrapartida que pudieren ser requeridas para viabilizar la propuesta; por ejemplo, necesidades de mejoramiento de tramos de la red EFE que el proyecto utiliza para sus servicios de carga portuaria”, explicó la ministra.