Un “boom minero” está revitalizando la inversión inmobiliaria en el norte chileno, destaca un reportaje de El Mercurio. Este fenómeno ha generado un aumento en los proyectos de construcción, tanto de primera vivienda como de renta residencial, en diversas ciudades nortinas, incluyendo Iquique, Antofagasta, Calama y Copiapó.
“Estos proyectos no solo generan empleo, sino que también impulsan el desarrollo urbano y mejoran la infraestructura de la región”, destacó el economista Carlos Mendoza. “Estamos viviendo un pequeño boom de inversión minera”, subrayó su colega Jorge Selaive, economista jefe de Scotiabank, quien recordó un auge similar que cambió el panorama inmobiliario en las capitales regionales de la zona.
Según un reciente catastro de la Corporación de Bienes de Capital (CBC), durante el periodo 2024-2028 la inversión privada y estatal a materializarse en las regiones mineras del norte Chile -sumando proyectos con un cronograma definido- ascendería a US$ 63.867 millones. De ese monto, US$ 21.330 millones, equivalente al 33% del total, corresponde a más de 40 inversiones mineras en Antofagasta y Tarapacá.
Entre los proyectos inmobiliarios más destacados se encuentran nuevas urbanizaciones y la mejora de infraestructuras existentes. “Efectivamente, los proyectos mineros, que son inversiones cuantiosas y largas, se van materializando en el tiempo y eso tiene un correlato con la demanda por vivienda, ya sea para compra o en formato de arriendo, lo que a su vez requiere inversión inmobiliaria para generar esa oferta. Con el volumen de inversión que estamos viendo, debiese haber algún impacto valioso en la zona norte”, proyectó Slaven Razmilic, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios.