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En su segunda sesión a cargo, el nuevo alcalde de Ñuñoa, Sebastián Sichel, ratificó junto al concejo municipal una inédita ordenanza para el retiro del cableado en altura abandonado. El proceso debiera partir en la zona de Plaza Egaña y a lo largo de todo el Eje Irarrázaval.
La nueva norma obliga a empresas eléctricas y de telecomunicaciones a extraer todos sus cables en desuso, aplicando multas si el proceso no se realiza dentro de ciertos plazos. La moción, que busca mitigar el impacto de la contaminación visual de la llamada “chatarra aérea”, fue aprobada por la unanimidad de los concejales.
Durante la reunión también se ratificó la rebaja en el pago de patentes comerciales en el Barrio Italia, específicamente en el polígono que delimitan las calles Caupolicán, Salvador, Irarrázaval y Condell. La iniciativa busca promover la formalización de los emprendimientos y atraer más locales comerciales a la zona.
“Son buenas noticias: seguimos trabajando para hacer las cosas bien y de forma seria”, prometió Sichel tras el fin del concejo.