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Las municipalidades de Ñuñoa y Providencia presentaron un nuevo plan de vigilancia conjunta para optimizar su respuesta ante delitos e incivilidades: específicamente, los equipos de seguridad ya no tendrán barreras comunales para desplegar su acción preventiva en zonas comerciales y turísticas.
El alcalde de Providencia, Jaime Bellolio, destacó la relevancia de eliminar trabas administrativas que dificultan el trabajo de los equipos de seguridad en los límites comunales.
“Las personas no tienen por qué saber dónde termina Ñuñoa y dónde empieza Providencia, pero sí deben sentirse seguras en todo su trayecto”, destacó.
Así, desde febrero, patrulleros en bicicleta se sumaron a los recorridos habituales de motos, autos y operativos de copamiento en sectores como Barrio Italia, Plaza Ñuñoa y Bellavista. Además de patrullajes de miércoles a domingo de 14 a 23 horas, se realizarán operativos de fiscalización conjunta en sectores conflictivos y se integrarán los sistemas de cámaras de televigilancia de ambas comunas.
El alcalde de Ñuñoa, Sebastián Sichel, enfatizó el impacto positivo de esta labor conjunta: “La seguridad no solo es prevención, es confianza. Y cuando hay confianza, el turismo y el comercio crecen. Este plan no solo protege, sino que también orienta y acompaña a quienes visitan y trabajan en estos barrios”.