En su reunión de julio, el consejo del Banco Central (BC) decidió aplicar por primera vez en tres años un recorte en la Tasa de Política Monetaria (TPM). Sorprendiendo al mercado, que esperaba una baja menor, el BC redujo la tasa en 100 puntos base, de 11,25% a 10,25%, la reducción porcentual más grande registrada desde 2009.
La TPM, en términos técnicos, es la tasa a la cual el BC les presta dinero a los bancos comerciales. En la práctica, este indicador es fundamental para miles de personas, pues representa la referencia para todas las tasas de interés del sistema financiero: créditos de consumo e hipotecarios, tarjetas de crédito y otros productos o servicios que cobren intereses.
Que la TPM baje anticipa que las entidades financieras también les bajarán la tasa promedio a sus clientes, lo que irá paulatinamente reduciendo el coste del crédito. De acuerdo a fuentes del Ministerio de Economía citadas por el Diario Concepción, “la rebaja de la tasa de interés por parte del Banco Central marca un inicio de una serie de rebajas durante los próximos 6 meses como mínimo”.
Según estimaciones del mercado, en cuanto a los créditos hipotecarios se espera que ya en septiembre comiencen a evidenciarse caídas notorias en las tasas promedio.