Seis nuevos trenes se sumaron a la flota que opera la ruta Santiago-Rancagua, que transporta a más de 18.000 personas al día. Las máquinas, de procedencia china, permitirán entregar un mejor servicio a los pasajeros y aumentar 30% la frecuencia del servicio en horarios punta.
El proceso de renovación significó una inversión de 43,2 millones de dólares. “Queremos que esos ciudadanos de Rancagua, Graneros o Buin viajen cómodos y seguros a Santiago, sea para trabajar o por estudios”, expresó el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz.
Los nuevos coches -fabricados por el consorcio chino CRRC/Sifang- cuentan con climatización (aire acondicionado y calefacción), iluminación led y cómodas butacas.
Estos modernos carros, dijo Muñoz, fijan un estándar para el nivel de calidad que se espera que entregue el transporte público. “Un buen servicio impacta profundamente en la vida de las personas. Un traslado más expedito como el que entregan los trenes hace que una persona pase más tiempo con su familia”, destacó.